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¿Es un mal momento para invertir en startups de Internet?

Ya nadie duda que entramos en crisis. Por si fuera poco, los que saben de finanzas dicen que a partir de agosto las vamos a pasar canutas. Entramos, por tanto, en un periodo en el que va a escasear el dinero y todo el mundo tratará de recortar costes. Mal momento también para las startups de Internet.

  

El primero que lo está notando es Google. Su cotización en Bolsa no para de bajar desde diciembre, arrastrada por la crisis general y por un descenso de la confianza en la publicidad en buscadores. Es cierto que en los periodos de recesión uno de los mercados que más sufre es el del marketing, porque es el primero que se suele recortar. Pero existía la creencia generalizada de que la publicidad en Internet aguantaría, al ser mucho más eficaz.

Esto va a afectar, sin duda, a las startups y especialmente a todas aquellas que basan su modelo de negocio en comercializar espacios publicitarios. También tendrá efectos perniciosos para las que se pusieron en marcha en 2006 y 2007 con capital riesgo, en la medida en que van a tener que retrasar sustancialmente su breakeven (momento en que empiezan a ser rentables). Algunas tendrán que despedir a gente dentro de no mucho o buscar rápidamente un comprador.

Pero las épocas de recesión también tienen sus aspectos positivos:
– Se crean menos startups y, por tanto, hay menos competencia.
– Son las empresas mejor gestionadas las que aguantan. Se trata no sólo de crear un gran producto sino también de tener los costes más reducidos.
– Las grandes empresas despiden gente y subcontratan todo lo que pueden. Para las consultoras puede ser una buena época.

Y una reflexión. Lo malo de la economía financiera en la que vivimos es que se crean y se deshacen muchas empresas en base exclusivamente a unos cálculos en un excel. Para los que creemos de verdad en Internet y tenemos paciencia, no hay ningún problema. La Web 2.0 va a triunfar. Tardaremos un poco más, pero es un fenómeno imparable.