La UE cree que el software social puede ayudarle a eliminar la brecha digital que impide que algunos ciudadanos accedan a las nuevas tecnologías. En un informe titulado “La e-inclusión revisada” la Comisión Europea analiza la dimensión local de la Sociedad de la Información y concluye que aplicaciones como el e-mail, los blogs o las redes sociales pueden convertirse en “impulsores” del uso de Internet. “Encuestas internacionales demuestran que el uso del correo electrónico para mantenerse en contacto con familia y amigos es una de las principales razones por las que la gente se conecta”, explica el documento. El informe va más allá y ratifica que las nuevas tecnologías no están potenciando el individualismo sino todo lo contrario, ya que están creando oportunidades de interacción para mucha gente con dificultades, tanto psicológicas como físicas.El estudio incide en el hecho de que las comunidades virtuales y reales están cada día más mezcladas, hasta el punto de que se refuerzan entre sí. El informe aplica esta misma conclusión a la cohesión regional, ya que interpreta que la economía del conocimiento está generando una nueva brecha entre zonas con más redes sociales online y aquellas que han quedado al margen de estas redes de conocimiento y aprendizaje.”Los proyectos de redes comunitarias llevan a la población local a juntarse y discutir sobre temas cercanos y oportunidades”, explica el estudio. Eso sí, se aclara que estas redes deben incorporar a toda la población y no sólo a los “tecnológicamente avanzados”.Además, se lanza un piropo hacia iniciativas como los KZgunea o los telecentros rurales, porque extienden el acceso y conocimiento a todos los sectores, generando e-inclusión (acceder a Internet para realizar e-gobierno y otros procesos de interés social). Y finalmente, se alaban las posibilidades del software social para lograr este objetivo de e-inclusión, ya que permite “explotar nuevas formas de sociabilidad y conectividad”.(publicado originalmente en EnpresaDigitala.net)