Esto sí que es una inocentada. Un tío se ha hecho pasar por "presidente de Facebook" y ha conseguido que un par de telediarios y prestigiosos periódicos y revistas franceses le entrevisten y hablen de él. Obviamente, todo ello envuelto del habitual chauvinismo de nuestros vecinos. Que un francés llegue a ser presidente de Facebook les parecía algo genial, digno de salir en portada. Una vez descubierto el pastel, las carcajadas de los bloggers del otro lado de los Pirineos se escuchan hasta en la Galia. Más información en Techcrunch. ¿Habría podido ocurrir lo mismo en España? Lo dudo. Creo que los periodistas españoles son mucho más críticos y, sobre todo, menos nacionalistas.