Desde que salió Vine, aplicación para Twitter que permite grabar vídeos de hasta 6 segundos de duración, ha habido mucha polémica relacionada con esta aplicación. Empezando porque hay bastantes secuencias pornográficas en Vine y esto provocó que la aplicación fuera retirada del App Store ya que “facilitar el acceso a contenidos pornográficos” va en contra de la política antipornográfica de Apple.
Pues bien, desde su lanzamiento, Vine se ha convertido en una plataforma difundir todo tipo de contenidos, como por ejemplo: tráilers de películas para generar intriga, resúmenes de spots publicitarios, resúmenes de viajes, historias y narraciones por parte de periodistas… Entre estos usos nos ha llamado la atención lo que llaman “vineresumen”. Una periodista llamada Dawn Siff fue la primera en hacer un vídeo de 6 segundos explicando por qué tenían que contratarla. Gracias a su creatividad y a su iniciativa, Siff consiguió viralizar su cv a través de Twitter, se posicionó como una persona creativa, pionera y capaz de aprovechar las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías.
Hay agencias de publicidad como DDB que ya utilizan en sus procesos de selección la aplicación de Vine por considerar que pueden valorar la creatividad de los candidatos de esta forma y que esto les va a ayudar a elegir a la persona adecuada para el puesto que ellos ofrecen.
Vine ha conseguido de momento un gran éxito en sus cuatro meses de vida y se ha convertido en líder en el ámbito de las aplicaciones de vídeo, consiguiendo que los usuarios también se interesen por el formato vídeo cuando antes siempre había prevalecido el interés por las imágenes. Ahora su reto es desligarse un poco de Twitter y poco a poco convertirse en una red social independiente. A partir de ahora el éxito depende de los usuarios, de que el contenido que vayan colgando los usuarios logre captar el interés de sus semejantes.