Creo que, para los chicos de mi generación, los cromos eran como los videojuegos para las actuales. Los coleccionábamos, pegábamos, cambiábamos, admirábamos… Así que no me extraña que las empresas que los fabricaban y distribuían no estén pasando por su mejor momento. Menos mal que una de estas compañías ha empezado a innovar.

Y la novedad viene de la mano de la Web 2.0. Se trata de Panini, que creo recordar que era junto a Fher la empresa más importante de este sector. Pues bien, dado que ahora su público potencial pasa horas y horas en Internet, han creado una especie de cromos 2.0 que cada usuario puede crearse por sí mismo.

Eso sí, no se trata de eliminar los adhesivos de toda la vida sino de complementar este negocio. En la web MyPanini puedes crear cromos con tu imagen y la camiseta de tu equipo de fútbol. Para recibir los adhesivos en papel, pagas online y te los mandan a casa. Y luego puedes pegarlos en tu álbum como si fueran jugadores reales.

La idea no es novedosa. Otras empresas del mundo offline han diseñado iniciativas similares. Recuerdo de memoria los sellos personalizables de Correos (qué poco se ha hablado de esto, ¿verdad?), o las piezas configurables de Lego, e, incluso, a una Barbie a la que se le podía acoplar ropa diseñada online. También hay algunas webs que te elaboran camisetas a partir de diseños que tú les remites.

Todas estas iniciativas tienen mucho que ver con las nuevas tendencias del marketing personalizado y con realidades como MySpace, una red social cuya principal virtud es que permite a cada usuario mostrarse de manera individualizada. En MySpace no sólo es posible relacionarse con mucha gente sino también configurar la web que cada uno utiliza como tarjeta de indentidad personal.