Enrique Dans anda con ganas de polémica y hoy escribe un artículo titulado "¿Madrid o Barcelona?" en el que se pregunta cuál es la ciudad más interesante para crear una empresa. Yo añadiría alguna más, como Bilbao o Málaga. Y ahora voy a dar mi opinión, basada en las experiencias de un emprendedor que tiene su empresa en un sitio que no son ni Madrid ni Barcelona pero que está continuamente en estas dos ciudades.

  

Creo que no hay una respuesta única. Todo depende del tipo de empresa que se quiera crear:

– Si tu mercado es exclusiva o fundamentalmente nacional, te interesa estar en Madrid, que se ha consolidado como "el mercado". Si quieres vender en España, tienes que estar en Madrid, porque los clientes están ahí. Pero ojo, esto se puede hacer de muchas maneras. Alianzo, por ejemplo, tiene oficina en Madrid pero por el momento exclusivamente comercial. Seguimos el modelo de, por ejemplo, Panda Security.

– Si su mercado es europeo, el mejor sitio es Barcelona. Creo que no hay duda de que la capital catalana tiene un hinterland (zona de influencia) mucho más reducido que Madrid, pero su atractivo europeo es muy superior. En Barcelona se habla mucho más inglés y es fácil conseguir profesionales dispuestos a vivir y trabajar en esta ciudad. Además, la cultura tecnológica de los catalanes está muy desarrollada. Son los primeros que comprendieron el poder de Internet. A mí cada día me gusta más Barcelona.

– Si su mercado es latinoamericano, el mejor sitio no es ni Barcelona y Madrid. Es Miami. Y es aquí donde creo que están errando muchas compañías españolas, empeñadas en "conquistar América" (comercialmente, se entiende) desde Madrid. Miami es, sin lugar a dudas, el lugar donde se hacen los negocios dirigidos a América Latina. Madrid tiene demasiadas distancias, fundamentalmente la diferencia horaria, un gran handycap.

– Si su mercado es Asia, mejor que se vaya directamente allí, principalmente a Hong Kong o a Singapur, que son los grandes puntos de entrada de empresas occidentales. Ultimamente también se está poniendo muy de moda Shanghai.

Dicho esto, creo que hay que introducir numerosos matices:

– Una empresa no sólo consiste en vender. También hay que "fabricar" y para eso Madrid y Barcelona no siempre son los mejores lugares. Hay tanta empresa que los buenos profesionales escasean. Además, la gente es menos fiel, algo muy grave en el caso de firmas tecnológicas donde el factor humano es fundamental. Esto no ocurre en otros puntos de España. En Bilbao, por ejemplo, tenemos tres universidades generando buenos ingenieros. Málaga también se está poniendo de moda, por el esfuerzo de la Junta de Andalucía y por su atractivo para los extranjeros que buscan el mejor clima. Aunque están tan atados al desarrollo inmobiliario que no siempre entienden que lo más importante de una empresa de Internet no son los locales sino el know-how.

– En el sector medios de comunicación es muy complejo montar una empresa de ámbito nacional fuera de Madrid. No hay más que ver las dificultades que han encontrado los grupos regionales, como Vocento o Godó, para hacerse "nacionales". Los periodistas que comunican para toda España tienen que estar en Madrid, por una serie de razones político-culturales. Los vendedores de publicidad, obviamente también. Creo que esto es aplicable a todos los nuevos medios.

– Existen puntos de España muy especializados en determinadas materias. Nadie puede negar que las mejores empresas de seguridad informática (S21Sec, Panda Security) han nacido en el País Vasco. El mercado del ERP (software de gestión de empresas) también está muy concentrado en Euskadi. Idem con Cataluña para todo lo relativo a la creatividad y el diseño. En Andalucía se han especializado en el mercado turístico y en Valencia siempre me ha sorprendido la cantidad de SEOs que hay.

– Las nuevas herramientas de trabajo colaborativo deberían empezar a relativizar todo esto. Cada día es más fácil trabajar a distancia, con ayuda de aplicaciones online que permiten realmente trabajar de forma sincronizada. Así que espero que en cinco años ya no tengamos que hacernos esta pregunta. O mejor dicho, que la respuesta sea: una empresa estará donde a sus trabajadores les apetezca estar.