Las instituciones públicas se empiezan a preocupar por los efectos de las nuevas aplicaciones que facilitan la geolocalización de las personas en tiempo real. La Comisión Europea cree que afecta a la privacidad y que por tanto debe estar contemplado en la Directiva de Protección de Datos. El Gobierno Vasco, por su parte, quiere evitar que personas con malas intenciones creen y controlen en FourSquare o Facebook Places sus delegaciones y sedes administrativas.

Lo cierto es que la suma de geolocalización universal y de computación en la nube nos sume en un auténtico cambio de paradigma en el que nadie podía haber pensado hace apenas dos años. Lo llevas todo en el móvil y tu celular sabe en todo momento donde estás. ¿Implica esto algunos riesgos?
No lo tengo muy claro. Los operadores de móviles llevan años acumulando esa información y, que yo sepa, no la han utilizado contra nosotros. Más bien al revés: se ha empleado para perseguir a terroristas. La promesa comercial de que las empresas nos enviarán su publicidad en función de dónde estemos en cada momento es más una utopía que una realidad. Por el momento hay poco dinero en ese sector, aunque FourSquare y Groupon quieren cambiar esa realidad.
Es cierto que ahora tiene más dificultades el que quiere ocultar algo. Engañar a tu pareja o conseguir la ubicuidad de Rosa Díez son cada día más complicados, a medida que crece el uso de las redes sociales en las que anunciamos dónde estamos y qué hacemos. Eso sí, de vez en cuando tendremos necesidad de descansar de todo esto y desgeolocalizarnos.