España lidera el uso de las herramientas sociales en las empresas europeas, según señala un estudio encargado por Google y basado en 2.700 entrevistas a profesionales de siete países. En concreto, el 74% de los encuestados en España aseguran utilizar Facebook u otras redes, frente al 53% de los alemanes o el 55% de los holandeses.

¿A qué se debe este mayor éxito de las herramientas sociales en España? Es cierto que puede haber una mayor propensión al uso de redes que permiten comunicarse, como en otros países mediterráneos, pero fundamentalmente lo que hay son más empresas de servicios y creativas y menos industriales, al contrario de lo que sucede en Alemania u Holanda.
Sea como fuere, el estudio de Google intenta medir en qué medida estas herramientas sociales mejoran la labor de las compañías y les ayudan a crecer más y a ahorrar dinero. Hay varias funciones en las que son especialmente útiles:
– Encontrar gente e información (41%)
– Colaborar y compartir conocimiento (37%)
– Incrementar las relaciones (34%)
– Reducir el volumen de emails (31%)
Como resultado de todo ello, la productividad de las compañías debería mejorar. ¿Cómo? Reduciendo el volumen de emails (+25%) y reuniones (+23%) y, por tanto, el tiempo perdido; aumentando la velocidad de entrega de los productos y servicios (+27%) y mejorando los resultados financieros (+24%). Como conclusión, la media de los entrevistados calculan que podrían ahorrar dos horas a la semana.
Pero las ventajas no son solo para las empresas. Los propios profesionales reconocen que, gracias a las herramientas sociales, el 86% de los usuarios habituales han conseguido una promoción en su trabajo, frente al 61% de los que no las utilizan con tanta frecuencia. También se incrementa la satisfacción laboral: el 38% de los usuarios están contentos, frente al 18% de los que no lo son. Como resultado, el 64% recomendarían su empresa.
¿Y qué herramientas utilizan? El 32% emplean redes externas como Linkedin, Facebook o Twitter, para uso profesional. El 23% usan a diario una herramienta propia de sus empresas y más de la mitad acceden a ella al menos una vez a la semana. Las compañías con mayor crecimiento son las que tienen más aplicaciones de este tipo, especialmente para mejorar la calidad y la innovación de sus productos.