Los cambios en el algoritmo de Facebook empiezan a parecerse, en sus efectos, a los que tradicionalmente viene aplicando Google. Con una diferencia: mientras en el buscador nos va a costar mucho amoldarnos, en la red social podemos adaptarnos de un día para otro con solo tener en cuenta lo que se ha modificado. Y Facebook acaba de hacer cambios importantes. Veamos cómo tenerlos en cuenta.

Para empezar, ha reforzado el valor de los amigos, con lo que si quieres que lo que publicas en una página se vea más, tendrás que ganar fans que además sean contactos de los que escriben en ella y del resto de fans. Esto significa dos cosas:
– Te conviene publicar en una página con tu propia identidad en lugar de la de la marca.
– Te conviene que tus fans sean afines entre ellos, porque así sus comentarios y megustas se verán respectivamente. Esto es muy atractivo para tiendas y marcas con comunidades locales muy fuertes.
– Si eres capaz de producir noticias, llévalas a Facebook, ya que la red social quiere convertirse en un lugar en el que compartir información.
Además, Facebook ha incrementado la penalización sobre lo que denomina «memes». Es decir, fotos que circulan masivamente a través de la red social y especialmente aquellas que están alojadas en servicios externos. Esto es lógico: Facebook quiere priorizar el contenido exclusivo. Por lo tanto, si gestionas una página, intenta evitar enlaces a artículos externos y escribe cosas propias con fotos hechas por la propia marca.