Pese a la moda del blog, es raro encontrarse con directores generales que bloguean. En España, creo que en todos los casos se trata de empresarios de Internet. Sólo conozco dos casos de directores generales que bloguean y los dos son responsables de sendas compañías públicas inmobiliarias del País Vasco: Pablo Aretxabala y Fernando Martínez Hinojal. Empiezo a sospechar que van a tener que pasar muchísimos años para que los directores generales blogueen.Y eso que hay muchos casos (y muy buenos) de blogs de este tipo, aunque todos ellos, insisto, ligados a empresarios de nuevas tecnologías: Martín Varsavsky, Alvy-Nacho, Rogelio Bernal, Juan Luis Polo, Julio Alonso, Fernando Polo, Carlos Blanco, Jesús Encinar, Arsenio Escolar… Y además, esta lista crece día a día, porque sus responsables perciben los beneficios en reputación, visitas e imagen en general que les reporta su blog.Sin ir más lejos, basta con mencionar el creciente número de empresas y organizaciones que llaman a Alianzo a raíz de encontrarse con nuestra web buscando algo en Google relacionado con redes sociales. Todavía no son nuestros clientes más gordos, pero sí se puede afirmar que son los que más nos habría costado captar de adoptar una política comercial tradicional (es decir, enviando una persona a hacer la calle).Pero al mismo tiempo, junto con estos beneficios, me temo que los directivos-bloggers cada día son más conscientes de que esto de escribir todos los días puede llegar a ser pesado y hasta esclavizar. Su tiempo es lo más preciado y preparar un ‘post’ supone restar horas a la familia o a proyectos con rentabilidad directa. Y sobre todo, creo que la mayor parte de los directores generales son muy pulcros con su intimidad y creen que escribir un diario, por muy empresarial que sea, supone contar cosas personales. Por no hablar del «miedo» a los comentarios negativos.En fin, que creo que va a costar muchos años convencer a los grandes directivos de empresas no tecnológicas para que blogueen. Dudo mucho que un Botín (padre o hija) se dediquen a estos menesteres. Quizás lo hubiera hecho un Mario Conde, pero por razones extra-empresariales. En EE.UU. siempre citan el caso de Randy Baseler, vice-presidente de Marketing de Boeing, pero no hay que olvidar que él no es el director general de la empresa.Y los dos casos que he citado al principio de este ‘post’ son muy buenos. Se trata de dos compañías desconocidas para la mayoría de los mortales y que, gracias al blog, algunos estamos empezando a comprender su labor. Pero no hay que olvidar que sus empresas tienen fundamentalmente un objetivo de servicio público y que la bitácora juega un papel de un valor incalculable dentro de esta misión.Nota: Escribieron sobre este tema hace un par de meses en la revista digital Silicon.fr
El director general de mi empresa, Sun Microsystems, tiene su propio blog: http://blogs.sun.com/jonathan
Cualquier empleado puede tener su propio blog corporativo y esto ha provocado un efecto dominó.
Se pueden ver las motivaciones de esta política de empresa en la entrevista que publica Cinco Días
http://blogs.sun.com/jaimecid/entry/entrevista_a_jonathan_schwartz_en
Llego a este post, como el conejo de Alicia: tarde. Gracias por la referencia. Una pequeña reflexión añadida: en mi caso, escribo bastante porque ejerzo poco de director general 😉
Por definición un Director General no viene con dón comunicativo por defecto (al menos en el mundo Latino). Es posible que tengan mucho que decir pero no saben como hacerlo de una manera abierta y fuera de un consejo o reunión.
Inlcuso he conocidoa directores generales de portales en España que sólo sabían manejar el correo lo suficiente como para reenviar los pps que les mandaban sus amigos. Imaginaros el contenido.
El que un director general publique en post es algo de partida bueno pero debe de englobarse dentro de una estrategia de comunicación de la empresa a la que representa. ¿Varsaky vende FON o se vende él?
En todo caso se necesita estrategia y capacidad para llevarla a cabo. ¿Cuantos políticos escriben un blog? Quiero decir, ¿cuantos políticos que tienen un blog son realmente los escritores del mismo?
No se trata de tiempo, se trata de talento. Un director general es seguramente la persona que mejor disposición de su tiempo laboral puede hacer.
La pregunta sería… ¿por qué deberían querer bloguear?. Si alguien consigue hacerles ver que es más beneficioso bloguear que no hacerlo, lo harán. Pero mientras tanto, me parece lo más lógico del mundo que no lo hagan: «los experimentos, con gaseosa», dirán.
Gracias por los inmerecidos halagos. En mi caso, como analfabeto tecnológico que soy (pero aprendiz receptivo-activo) recién incorporado al blog, sólo espero poder comunicar, como dice Pablo en su blog. Intercambiar, recibir y enviar información por un cauce más o menos libre, abierto.
Comparto los comentarios: el problema no es el tiempo. Son las ganas.
Saludos.
Por alusiones 😉
Iba a meter un comentario, pero me salía tan largo, y el tema tan interesante, que he preferido escribir un post en mi blog.
Si os interesa: http://hontza.blogspirit.com/archive/2006/08/29/hhhhhhhhhhhhhhhhhh.html#more
yo creo que lo que más les preocupa (en general a todas las empresas) es la interacción y la transparencia que existe en los blogs. están demasiado expuestos para lo que tradicionalmente ha sido habitual. en españa, por ejemplo, hasta hace bien poco no sabíamos ni siquiera la cara que tenía amancio ortega. como para ‘exhibirse’ en público mediante un blog!