La receta ideal de marketing viral suele incluir alguna referencia al sexo, por la capacidad que tiene este tema para propagarse, especialmente entre el sexo masculino. Por eso me ha encantado la campaña que ha lanzado el Gobierno danés para frenar el exceso de velocidad en las carreteras de este país.
La utilización de la imagen de la mujer y en concreto la sugerencia sexual, por su puesto que atrae la mirada (y no al cartel) pero no siempre acompaña al efecto concreto de la campaña. La marca no suele salir perjudicada y se recuerda mejor lo agradable, cómico, familiar,… Este incremento de notoriedad puede afectar más a la imagen del país, de su gobierno, de la jefatura de tráfico. Para respetar los límites de velocidad hay que educar en el sentido de los limites. De todos los límites y del respeto. (Por mucho que me gusten las modelos)