Ayer hablaban en El País del efecto Menéame a la hora de "despertar" a los periodistas de los medios convencionales sobre el caso de Enaitz, el niño atropellado en La Rioja a cuyos padres había demandado el autor del atropello. En Internet el tema causó tanta indignación que empujó a los periodistas a cubrir el tema y finalmente llevó al autor del atropello a retirar su demanda.
Pero la fuente última de todo esto se llama Dicky del Hojo, un amigo mío que también es periodista y conoce personalmente a los padres de Enaitz. La diferencia es que no trabaja en un medio convencional. Escribe en su blog y desde allí aspira, como todo periodista, a cambiar el mundo a mejor en la medida de sus posibilidades. Fue Dicky el primero que recordó el tema hace un par de semanas. Su post se meneó y desencadenó el efecto que ha descrito El País.
Moraleja: los ciudadanos tenemos hoy posibilidades de cambiar las cosas a través de los medios sociales. No es necesario salir con cacerolas a la calle ni convocar multitudinarias manifestaciones. Pero tampoco basta con escribir en un blog. A no ser que se llame Microsiervos. Hay que utilizar menéames y demás herramientas para dar mayor visibilidad a los temas y someterlos al juicio popular. Así que me alegro por partida doble del desenlace del caso Enaitz.
Jose: Gracias por tu post.
La verdad es que este tema me ha superado en lo personal y en lo profesional, pero sólo con hablar con Rosa, la madre de Enaitz, y comprobar su satisfacción he tenido una compensación más que suficiente.
Es cierto que algo se puede hacer, pero en este caso, además de Meneamé, se han juntado un montón de casualidades felices que ya contaré cuando todo esté más tranquilo…
Mi compromiso con Enaitz y sus padres es que, ahora que todo el follón mediático ha pasado, el tema no quede en el olvido. Todavía queda todavía lo más importante, abrir un juicio penal por imprudencia al volante contra el conductor que tuvo las desfachatez de denunciar a los padres por los daños que originó la muerte de Enaitz en su flamante AUDI.
Hablando de otros temas; estoy esperando impaciente la nueva edición de Blogak 2.0, la del año pasado fue fantástica.
Un abrazo Jose.
Tal y como dice Dicky, todavia no ha acabado y no debe de caer en el olvido. Todavia queda lo mas importante y es que en la medida de lo posible ese individuo pague y se haga justicia.
La verdad es que es impresionante cómo un caso que llevaba en la red muchos meses estaba «dormido» en la web de Stop Accidentes desde hacía muchos meses afortunadamente ha revivido mediáticamente, supongo que no sólo por la cercania de la fecha del juicio. Sería interesante conocer esas felices casualidades…
y pensar que el mercado español tiene un porcentaje de participación muy bajo la voz de los bloggers se deja escuchar gracias a portales como meneame, digg, y barrapunto