Nokia se está transformando por completo, casi sin que nos demos cuenta. El fabricante de móviles quiere dejar de ser una empresa de hardware y convertirse en una de servicios online, una especie de Microsoft en versión móvil. Por de pronto, ha comprado tres líderes: el de publicidad en celulares Enpocket, el de sistemas de navegación y mapas Navteq y la red social de intercambio de fotos y vídeos Twango.
¿Por qué? Al parecer, en Nokia creen que pronto el mercado de terminales móviles se va a parecer al de ordenadores: imperarán los clónicos con sistemas operativos más o menos estándarizados, con lo que las barreras de entrada caerán enormemente y el negocio dejará de ser fabricar cacharros, salvo que se incorpore un componente de diseño y lujo. Esto último ya lo hace Nokia, pero no es suficiente.
En la empresa finlandesa tienen claro que el negocio más importante está en los servicios y software que los usuarios pueden descargarse y usar en su móvil. Más o menos lo que hizo Microsoft cuando aparecieron los primeros clónicos. En ese momento, IBM, que era la principal empresa de informática, las empezó a pasar canutas. Y entre los servicios que más le interesan destacan los que están ligados a la posición en que el usuario se sitúe en cada momento. Ahí Navteq encaja perfectamente como proveedor del servicio, Enpocket como gestor de la publicidad y Twango como sistema de intercambio de contenidos.
Y poco les va ha costar mucho dar el paso, hoy subcontratan todo, todo. Por cierto, me dará cierta penilla, porque lo hacen muy bien, de las muchas auditorías de calidad que tuve cuando trabajaba en una empresa fabricante de componentes, la más «profesional» con mucho, fue la de Nokia.
…y Nokia debería comprar Yahoo!
Las comunidades blogger se constituyen como la herramienta de marketing de potencial más efectivo ya que proporcionan al consumidor la experiencia del feedback. Igualmente, las campañas virales (Youtube) se muestran como una manera eficaz para el lanzamiento de productos.
Resulta necesario empezar a contar con expertos en las compañías, que puedan explotar estas redes sociales. Las agencias no cuentan con la experiencia suficiente en este campo y su tendencia es aplicar las mismas estrategias que para los medios tradicionales, lo que no resulta eficaz ni eficiente para las reglas del juego de los medios sociales.