Es importante mantenerse al tanto de cómo van las principales redes sociales del mercado, en la medida en que eso te puede ayudar a conocer mejor dónde está el negocio. Por eso es interesante saber que Twitter va muy bien a nivel financiero pero que las cosas no marchan de la misma manera para FourSquare.
Mientras la red social del pajarito podría estar ganando dinero ya en estos momentos, la de los checkins no encuentra nuevos inversores. Twitter ha alcanzado los 350 millones de dólares de facturación en 2012 a través de la publicidad incrustada en los tweets y de la venta de sus contenidos.
El negocio tiene tan buenas perspectivas que se espera que se triplique este año. Mientras tanto, FourSquare está tan alejado de sus objetivos financieros, que los inversores le están dando la espalda, según un informe de PrivCo. Y eso que hace apenas año y medio se valoraba a esta startup en 550 millones de dólares.
¿Qué le ocurre a FourSquare? Estas son algunas posibles explicaciones:
– No encuentra un modelo de negocio sostenible. Groupon y sus clones se han comido el escaso negocio que había en la publicidad local. Se rumorea que sus ingresos de 2012 no superaron los 2 millones de dólares.
– La audiencia ni sube ni baja.
– En su segmento ha entrado todo el mundo, con lo que la competencia es atroz.
– Es un segundón en todas las áreas en las que opera. Las marcas tienen en cuenta a Facebook y a Twitter, pero desprecian a FourSquare.
– Los usuarios se han cansado de su juego de los checkins y los alcaldes.
– No tiene ninguna diferenciación tecnológica.
– La base de datos de FourSquare es muy mala.
Yo siempre quise darle a una oportunidad pero al final desistía. Como bien dices el juego de check-in y alcaldes ya está un poco desfasado, por descontar que casi todas las herramientas ofrecen opción de geolocalización.
El público objetivo que tenía haber respaldado a esta red social debiera haber sido el comercio. Si Foursquare hubiese penetrado más en este sector, quizá los usuarios hubieran sido más y su uso mayor. Incluso con haber facilitado un sistema de cupones de descuento, podía haber borrado de un plumazo las miles de aplicaciones que hay con ofertas geolocalizadas.
Recientemente ha salido una nueva app (de origen bilbaíno), Boletus, que conceptualmente tiene muy buena pinta, pero siempre dependerá del trato a favor que le den los comercios y que los usuarios aprecien una mejora o un beneficio mayor a que si no utilizaran la app, y no sólo ser alcalde de un «sitio».