Ya he comentado en alguna ocasión que Twitter es, para muchas personas, un gigantesco juego online basado en la popularidad. Pero cada vez son menos los que participan en en él. La agencia de análisis de mercado Ipsos/CGI ha calculado, a partir de una encuesta sobre 500 personas en Francia, que solo el 17% de los tuiteros se pueden calificar como «influenciadores»; es decir, que utilizan esta red social de manera intensiva con el fin de alcanzar la máxima visibilidad posible tanto con seguidores como con retweets de lo que dicen.
Lo cierto es que hay dos grupos de usuarios más numerosos:
– Los chateadores (31%), a los que les gusta escribir cosas pero les da un poco igual si generan mayor o menor atención.
– Los intimistas (36%), a los que les gusta escribir solo para un grupo pequeño de conocidos.
Además, hay un cuarto grupo de tuiteros muy minoritario al que Ipsos/CGI denomina seguidores (14%) y que limita su actividad a leer lo que ponen los demás. Para ellos Twitter es una fuente de información más. Mi sensación personal es que estos suponen mucho más del 14%.